La ciudad del cine, en la que se han rodado las más románticas de las películas, la ciudad de las cuestas infinitas, de los tranvías, del sol, de la música y de la vida en la calle. Para llegar a ella son tres los puertos aéreos que operan en la zona, pero sea como sea, tomar un taxi en San Francisco cuando se acaba de aterrizar, siempre es una buena idea.
Del Área de la Bahía de San Francisco, ella es el centro cultural, pero también en lo que a finanzas y a sistema y gestión de transportes se refiere. Se trata de un área metropolitana que, además de la costa, se compone de varias islas que la rodean, a una distancia de más o menos 40 km cada una en el Océano Pacífico.
La fama que se desprende de aquel movimiento hippie sucedido en sus calles en los años sesenta y setenta, es un aura real que pervive envolviendo la ciudad californiana, en la medida de que las formas actuales lo permiten. Sin duda, conocería es un viaje que nadie se querría perder.
Qué ver en San Francisco
- El Puente de Golden Gate: Y hablando del Pacífico, subidos aquí podemos observarlo desde un punto de vista único. Aunque sólo sea un fragmento del Océano, lo que se contempla desde este, que por algo es uno de los lugares más cinematográficos del mundo, es verdaderamente abrumador.
- El Tranvía: Conocidos como los Cable Car, estos coches en forma de tren tan hermosos y únicos no se mantienen si no por el reclamo que suponen, ya que el sistema ha avanzando de manera que, funcionalmente, no fueran necesarios. No imaginamos San Francisco sin sus raíles, que vieron la luz por primera vez allá por 1783.
- Las Damas Pintadas: No son más que varias casitas de estilo clásico estadounidense, pero son hermosas. Colocadas en hilera sobre una cuesta, dan la sensación de ser, en sí mismas, escalones. Su fama real radica en que al igual que el puente, o cualquier perspectiva empinada, son estrellas de Hollywood inanimadas.
- La Calle Lombard: Lombard Street es conocida, probablemente, ya a estas alturas, del efecto del boca oído, pues el hecho de su peculiaridad es sólo lo llamativo de su forma, compuesta de curvas que hacen serpentear el camino de manera exagerada. Se construyó así con la intención de ralentizar la bajada de los vehículos ante el peligro de la pronunciación de la cuesta de la calle.
Aeropuertos de San Francisco
Los Aeropuertos que dan servicio al movimiento humano que parte o llega a San Francisco son tres: el Aeropuerto Internacional, el Oakland Metropolitan Oak y el de San José. El primero, como ya parece indicar su nombre, es el más poderoso, y posee la terminal más grande de toda América del Norte.Está cerca de San Francisco, de Millbrae, de san Bruno y de la parte más central del sur del área.
Oakland, por su parte, se encuentra a 7,4 kilómetros de la ciudad homónima, que pertenece al condado de Alameda. En 2009, se posicionó con la mayor puntualidad en las llegadas de los 40 aeropuertos Norteamericanos con más tráfico.
Junto con Oakland, en San José es donde operan habitualmente las aerolíneas low cost, algo de lo que empezó a hacerse cargo también Sn Francisco, de un tiempo a esta parte. Su nombre completo es Aeropuerto Internacional de San José Normal Y. Mineta. También pertenece al Estado y se encuentra en su ciudad homónima, a sólo 4 km. del centro.
Tarifas aproximadas desde los aeropuertos
Aeropuertos de San Francisco |
1-5 personas |
6-8 personas |
Aeropuerto de San José – San José |
desde 29€ |
desde 37€ |
Oackland Metropólitan – Oakland |
desde 32€ |
desde 41€ |
Distancias entre los Aeropuertos de San Francisco y algunos puntos de interés
- Aeropuerto de San José - Universidad de Satanford: Desde la puerta de la terminal hasta la de la prestigiosa Universidad, la distancia total es de 16,7 millas. Un camino que se hace en 20 minutos.
- Aeropuerto de San José - Fremont: Hasta la ciudad del Condado de Alameda, la distancia es de 15,9 millas, 19 minutos en coche.
- Oakland Metropólitan - Alameda: Hasta la ciudad que da nombre al Condado hay sólo 10,6 millas, que se hacen con coche en escasos 14 minutos.
- Oakland Metropólitan - Universidad Estatal de San Francisco: Cambiando el destino, la distancia aún es tan asequible que sólo hay que atravesar 27 km. Para llegar a él, 30 minutos.
- Aeropuerto de san Francisco - Oakland: La distancia de la gran terminal a la ciudad al norte es de sólo 23 millas, 24 minutos en taxi.
- Aeropuerto de San Francisco - Palo Alto: Para llegar a la ciudad, centro intelectual de Santa Clara, la distancia es de 21 millas, o 20 minutos, si se prefiere.
Transportes en San Francisco
Si aun tratándose de Estados Unidos esta ciudad nos da un aire más parecido a lo europeo, no tiene, tampoco, falta de razón. De momento, podemos decir que un tercio de su población usa el transporte público, lo cual no es de lo más común en América. En cuanto a los pies, caminar por San Francisco puede ser muy cansado si es la única opción con la que se cuenta, sobre todo por lo empinado de su localización, que hace que la mayoría de sus calles sean como las laderas de un valle.
Tal vez, la fama del transporte publico tenga al go que ver con aquella de la que dota a la ciudad su tranvía, una manera de moverse de un punto a otro del mapa mientras se disfruta de una atracción turística. La comodidad y la diversión van de la mano si nos subimos a los raíles de San Francisco.
Además, no sólo se queda aquí, la San Francisco Municipal Railway, que está gestionada por la ciudad, incluye las líneas de los autobuses y de los trolebuses.
El servicio de Taxileader.net en los Aeropuertos de San Francisco
Haciendo uso del
Servicio de Taxi Privado en San Francisco, es posible conocer el precio exacto del trayecto antes de hacer efectiva la reserva y el transporte, sin que dicha tarifa varíe posteriormente. Además la comodidad en todos los sentidos y el ahorro de tiempo, están también asegurados.
Más allá de la ventaja que supone pagar por adelantado un precio cerrado y fijo, y despreocuparte de ese gasto en adelante, reservar un taxi con antelación ene l aeropuerto te asegura el traslado inmediatamente a la salida de la terminal, para llevarte hasta la puerta del hotel.
Esto significa el ahorro de un tempo precioso, sobre todo cuando se trata de un viaje o de una visita puntual, que se quiere y debe ser aprovechada al máximo. Por otro lado, la comodidad de no estar pendiente del equipaje durante el trayecto, de no cargar con él, más aún si tenemos que caminar de la parada de bus, por ejemplo, al hotel, y de no perderlo.
Pero esto no es todo, reservar un taxi implica seleccionar el tipo de vehículo, así como otras necesidades que requiera tu trayecto desde la estación de vuelo hasta tu destino.