La ciudad de Nueva York, más popularmente conocida como "la gran manzana", es la ciudad más poblada de los Estados Unidos de América. Es también apodada como "la ciudad que nunca duerme", debido al vaivén de gente que la visita a diario, tanto de día como de noche.
Nueva York dispone de tres aeropuertos: El Fiorello La Guardia, del que despegan y aterrizan los vuelos internos del país y las conexiones con Canadá, se encuentra en el distrito de Queens. Es el destino aéreo más próximo, dista sólo 13 km del centro de la ciudad. El Newark Liberty Airport está situado en el estado de Nueva Jersey, a unos 27 km del centro de Nueva York. Por último, el JFK, ubicado al sudeste de la ciudad, dista 19 km de Manhattan. Este último es el principal destino aéreo, no sólo por ser un aeropuerto internacional, sino también por su tráfico aéreo que supera los 49 millones de personas al año; mientras que el Newark tiene un tráfico de 35 millones de pasajeros y el Fiorello La Guardia es transitado anualmente "solamente" por unos 25 millones de personas.
Siendo una ciudad visitada por muchísimos turistas durante todos los días del año, es obligatorio que Nueva York cuente con una red de transporte eficiente. El medio de transporte público más utilizado es el metro, aunque su uso está desaconsejado durante la noche por la escasa seguridad. Los autobuses, sin embargo, no son el medio de transporte favorito de los neoyorquinos.
Es innegable que uno de los símbolos de la ciudad de Nueva York sea el taxi de color amarillo. La metrópolis americana está llena de autos de este tipo que recorren a toda velocidad "Avenues" y "Streets". Muchas veces los taxistas neoyorquinos saben cómo aprovecharse de sus clientes turistas, arrancándoles algunos dólares de más por el trayecto. Además, normalmente a los taxis se les deja una propina del 15%, que se suma a la suma de dinero solicitada por la carrera efectuada. El número de coches públicos que allí operan es altísimo, ya que Nueva York es una megalópolis que cuenta con más de 18 millones de habitantes. A los que hay que añadir, también, los miles de turistas que cada día la visitan por ser un centro cultural y económico de relevancia mundial.
Reserve inmediatamente un Taxi rellenando el formulario
Mucha gente piensa en la posibilidad de alquilar un coche para visitar la ciudad, pero debemos enfatizar en el hecho de que el carburante es ahora mucho más caro que hace algunos años atrás y que conducir en una megalópolis de este tipo, sobre todo para los turistas, puede ser una idea pésima. Por eso, muchas personas optan por los traslados en taxis privados que, a diferencia de los públicos, no están dotados de taxímetro. En Nueva York es increíblemente fácil perderse, es el resultado de la confusión que provoca el sistema cuadricular de las calles que dividen la gran manzana. Por tanto, no hay nada mejor que un traslado en un taxi privado, sin necesidad de compartir el medio con otras personas, que llegue directamente al destino deseado.
Para reservar un servicio de taxi desde o hacia los diversos aeropuertos de Nueva York, será suficiente rellenar el formulario de reserva presente en este sitio web. Es importante saber que es posible conocer el coste del traslado anticipadamente, ya que será calculado automáticamente por el sistema una vez haya sido introducida la información correspondiente. El conductor le esperará en el interior del aeropuerto, a la salida de la terminal, con un cartel en el que estará bien visible el nombre del pasajero introducido en la reserva.